Introducción a la reforma pensional en Colombia

En un reciente desarrollo legislativo, el Senado de Colombia ha aprobado una reforma pensional que promete cambiar radicalmente el sistema de pensiones del país. Este cambio, aún pendiente de dos debates más en la Cámara de Representantes, ha generado una gran expectación entre los colombianos, especialmente por el debate en torno a la posible reintroducción de la “Mesada 14”.

Estructura del nuevo sistema pensional

Pilar solidario

El nuevo sistema propuesto se articula en cuatro pilares fundamentales. El primero, el Pilar solidario, está diseñado para proporcionar ayuda a los adultos mayores que nunca han recibido una pensión. Según la Ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, este pilar busca ofrecer una vida digna a aquellos que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, asegurando un ingreso mínimo de 223,000 pesos. Este pilar también se ha extendido para incluir a personas con discapacidad significativa.

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Pilar semi-contributivo

El Pilar semi-contributivo se dirige a aquellos que, aunque han contribuido al sistema de pensiones, no cumplen con los requisitos para obtener una pensión completa. La reforma propone que estas personas reciban un subsidio adicional del Estado, que se sumará a su ahorro personal, aumentando así sus beneficios al momento de la jubilación.

Pilar contributivo

En el Pilar contributivo, se establece un umbral de ingresos de hasta 2.3 salarios mínimos. Los trabajadores que ganen hasta esta cantidad deberán cotizar al sistema público, y sus pensiones se calcularán basándose en el promedio salarial de los últimos 10 años. Aquellos que superen este umbral cotizarán a un sistema de ahorro individual, que complementará el pilar público.

Pilar de ahorro voluntario

Finalmente, el Pilar de ahorro voluntario permite a individuos con ingresos más elevados hacer contribuciones adicionales para asegurar una mayor protección en la vejez.

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Impacto y beneficios clave de la reforma

Uno de los cambios más significativos introducidos en el Senado es el adelanto en la aplicación de beneficios para mujeres, quienes podrán pensionarse con 1000 semanas de cotización a partir de 2025, en lugar de 2026. Además, se introduce un bono de género que proporciona semanas adicionales de cotización por cada hijo, permitiendo que muchas mujeres alcancen antes la jubilación.

Régimen de transición y futuros desarrollos

Régimen de transición

La reforma establece un régimen de transición que permite a los actuales cotizantes elegir entre permanecer en el sistema antiguo o migrar al nuevo, garantizando así la protección de los derechos adquiridos. Esta flexibilidad es crucial para los que están cerca de jubilarse y desean asegurar sus beneficios bajo las condiciones más favorables.

¿Qué sucede con la Mesada 14?

Contrario a los rumores iniciales, la reforma no reintroduce la “Mesada 14”. Este beneficio adicional, que fue eliminado durante el gobierno de Álvaro Uribe, requeriría una legislación específica aparte para su activación. Por ahora, la reforma mantiene las 13 mesadas tradicionales, dejando la puerta abierta a futuras discusiones sobre posibles enmiendas constitucionales que podrían restaurar la mesada adicional.

La Silla Vacia informo al detalle sobre la cornfirmación que algunos medios brindaron sobre la mesada 14 en la REforma Pensional.

La afirmación de que la reforma pensional reintroduce la “Mesada 14” ha estado circulando recientemente en plataformas como WhatsApp y Facebook, y ha sido promovida por usuarios en Twitter conocidos por su afinidad con el gobierno de Petro y por difundir desinformaciones anteriormente, como @Mafalda_2020_, @CelsoTeteC y @ElDuda_. Tras someter esta afirmación a un riguroso análisis con herramientas de verificación de hechos, se ha determinado que dicha afirmación es incorrecta.

A pesar de que algunos mensajes en redes sociales y reportes de medios como Noticias Caracol del 17 de abril indicaban que el Senado había aprobado artículos que revivían la Mesada 14 —beneficio eliminado en 2005 durante la presidencia de Álvaro Uribe—, la realidad es que la reforma pensional actual no contempla tal medida. En efecto, el documento legislativo aprobado hasta ahora mantiene las 13 mesadas tradicionales, sin adiciones.

La Mesada 14 fue originalmente implementada con la Ley 100 de 1993, beneficiando a quienes ya tenían derechos pensionales antes del 1 de enero de 1988, y se empezó a otorgar a partir de junio de 1994. Esta disposición compensaba a los pensionados previos a 1988 ante la falta de un ajuste pensional basado en el incremento del salario mínimo, situación que se modificó con la Ley 71 de 1988.

Posteriormente, una decisión de la Corte Constitucional en 1994 extendió este beneficio a todos los pensionados. No obstante, en 2004, el gobierno de Uribe, con el apoyo de sus ministros de Hacienda y Protección Social, propuso la eliminación de este beneficio para futuros pensionados como medida para preservar la sostenibilidad financiera del sistema. Esta propuesta se materializó en ley en 2005, limitando la Mesada 14 a aquellos pensionados antes del 25 de julio de 2005, y con ciertas restricciones salariales.

Por tanto, es incorrecto afirmar que la actual reforma pensional restituye la Mesada 14. Esta aclaración fue reforzada por una entrevista reciente con la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, en Noticias Caracol el 24 de abril, donde desmintió categóricamente tal información. La reforma mantiene inalteradas las 13 mesadas anuales, tal como lo especifica el artículo 32 sobre la liquidación y el monto de la pensión integral de vejez en el pilar contributivo.

Para aquellos interesados en entender mejor los aspectos clave de la reforma pensional recientemente aprobada por el Senado, se recomienda revisar análisis detallados que desglosan los principales puntos y cambios propuestos.

Conclusión

A medida que la reforma pensional avanza en su proceso legislativo, con la expectativa de que se convierta en ley para el 1 de julio de 2025, queda claro que el objetivo es crear un sistema más inclusivo y equitativo. Sin embargo, persisten dudas sobre su sostenibilidad y gestión, temas que serán seguramente abordados en futuros debates. Mientras tanto, el diálogo entre los ciudadanos y el gobierno será esencial para ajustar y perfeccionar esta reforma que busca proteger a los colombianos en su vejez.

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